Domesticado

Qué hace una mujer cuando el marido se muere?

Domesticar otra bestia

Hombres músicos

Los hombres son como los músicos: vienen, tocan y se van.

Hombre chicle

En qué se parecen los hombres a los chicles?

Entre más los pisoteas, más se pegan


Un hombre perfecto

Un hombre se acerca a la bibliotecaria y le pregunta:

- Señorita, dónde está el libro Hombre, un ser perfecto?

Y ella le contesta:

- Allá al fondo, en la categoría de ciencia ficción


El flojonazo

Eran dos amigos muy, muy poco trabajadores.

Uno le dice al otro:

-Oye, que ya me cansé de mi trabajo.

-¿Pero cómo, por qué?

-Sí, es que es muy cansador. Hay que jalar cosas muy pesadas para acá y para allá, y eso a amí no me gusta nada.

-Pero, dime, ¿hace cuánto estás trabajando en esto?

-No, si empiezo el lunes.


Puro negocio

En una plaza se encuentran dos compadres que en mucho tiempo no se habían visto; se saludan y uno de los compadres le pregunta al otro:

-Oiga, compadre, ¿qué ha hecho durante todos estos años que no nos hemos visto?

-¡No, compadre, qué cree, fíjese que compré un rancho!

-¿Ah, sí, compadre? ¿Y qué siembra?

-Pues fíjese que sembré papas, y ¿qué compadre? Que salen unas, ¡así de grandotas ! ¿Y usted qué ha hecho, compadre?

-Pos fíjese que yo hago unas ollotas, ¡así de grandotas, compadre!

-¡Ah, chihuagua! ¿y para qué hace esas ollotas?

-¡Pues para sus papotas, compadre!


La preocupación

Tres amigos están jugando póquer. Uno empieza a hablar sobre su esposa cuando iban a tener un hijo. Antes del parto, ella estaba leyendo Blanca Nieves y los 7 enanos, y nacieron 7 niños y 1 niña.

-La mía -dijo Jorge-, estaba leyendo Peter Pan y tuvo un niño.

-¡Caray! -dijo José-, al hospital, rápido, ¡mi esposa está leyendo los 101 dálmatas!


Los tres novios

Le decía una amiga a la otra:

-Yo he tenido tres novios, Alberto, Rigoberto y Roberto.

-Los tres terminan igual -le dice la amiga.

Y contesta la otra:

-Sí, dejándome plantada.


Taberna en el Sahara

Dos empresarios hablan de negocios:

-Estoy planeando algo sensacional; pienso abrir una taberna en el Sahara.

-¿Estás loco? ¡No te caerá ni un solo cliente, allá en medio del desierto!

-¡Quién sabe! Pero si me cae alguno, ¿puedes imaginarte la sed que tendrá?

Fuente lolazos.com